Esta es la historia de alguien. Si bien el lector atento puede llegar a reconocer este inicio del relato, el nudo y el desenlace de esta historia no tendrán semejanza alguna con la que el distinguido lector seguramente ya ha leído en alguna otra ocasión y podrá ver que un mismo inicio no siempre converge en un mismo final.
Este alguien tiene un nombre. Seguramente. Pero yo no lo conozco. Al nombre. A este alguien, sí. Pero realmente nos es prácticamente irrelevante el nombre de este alguien. Digamos que, para individualizarlo, para darle forma humana, llamaremos a este alguien por Alguien.
Alguien es un tipo normal. Tiene intereses, como cualquier otra persona. Y, también, por qué no, intereses en otra persona. Y curiosamente a esa otra persona le interesa alguien, que es, claro, Alguien. Podríamos, no puedo evitarlo, llamar a este nuevo interés de Alguien, por Alguna. Alguien y Alguna se conocieron por medio de
círculos. Eso círculos que alguna (y no Alguna) vez mencioné. Hasta hubo un futuro día de pesca.
Alguien y Alguna –de ahora en más, los Algunes, ¿vio?, para facilitar la escritura– no llegan a conocerse del todo y Alguna deja de contactar a Alguien. Alguien no comprende nada, aunque tampoco reclama algo, y la desazón lo absorbe. Y así como la desazón absorbe a Alguien, Alguien absorbe a su vez grandes cantidades de alcohol para olvidar a Alguna; sus técnicas milenarias del chamuyo y la seducción ya no le han funcionado.
Es que últimamente el pobre de Alguien anda mal de probabilidades y la dupla de la seducción y del chamuyo –amistad y química– se tuerce irremediablemente sobre la primera, que es justamente el dado que ha lanzado Alguna. Analizando un poco más el dado en profundidad (bueno, no en profundidad, pero sí viendo las caras del mismo), Alguien ha observado que sólo en una de las seis caras del cubo puede leerse la palabra "química". ¿Será que todas las Algunas usan el mismo dado? ¡Si tan sólo supiera quién es el maldito comerciante de azar que vende dados de amistad en vez de dados químicos!
Hay alguien que necesita empezar a tomar clases de casino o anotarse en el curso de croupier.
Una estampa de Ana Regina
Hace 1 año
1 comentario:
Esto lo escribí hace mucho tiempo. No es el texto que debo escribir de acuerdo a lo sugerido por Flor ... :-) .... lo prometo para más tarde
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